Para mi corazón basta tu pecho, para tu libertad bastan mis alas.
Pablo Neruda

jueves, 1 de octubre de 2009

¿Por qué será?

¿Por qué será que me siento protegida entre los pequeños edificios de París y las callesitas estrechas? Lejos de todo y de todos, como dice Sabines, sola, sola, sola. Con solo el cielo sobre mi y esas nubes que van y vienen tan blancas como grises, con ese viento tan frío que envuelve mi tibia piel y mi cálido corazón? ¿Por qué será?